Junio es considerado mundialmente como el Mes del Cuidado de la Fertilidad y es que esta enfermedad es mucho más frecuente de lo que imaginamos, aproximadamente 1 de cada 6 parejas en edad reproductiva experimentará problemas para embarazarse. Resulta obvio pensar que tenemos que cuidarnos, para evitar problemas de salud, tales como la diabetes, la hipertensión, etc., pero hay poca educación respecto al cuidado de nuestra fertilidad; sin embargo, hay cosas que podemos hacer para prevenir situaciones que puedan afectarla, disminuyendo así las probabilidades de padecer infertilidad. 

Para determinar los cuidados que debemos tener con nuestra fertilidad, primero debemos revisar cuáles son las principales causas de la infertilidad en hombres y mujeres:

 

  • Trastornos del ciclo menstrual

Los ciclos menstruales regulares son aquellos en los que el ciclo de maduración y liberación de un óvulo maduro ocurren influenciando al útero para que se recubra y se prepare para recibir un embarazo, este periodo generalmente debe durar de 26 a 33 días. 

Esto significa que si dura más o menos de este tiempo, se sospecha que no está ocurriendo un ciclo completo, esto puede estar influenciado por hormonas y por la herencia de línea materna. Si tus ciclos no ocurren en este periodo de tiempo, aunque no estés tratando de embarazarte, debes atenderte, pues a la larga, los óvulos se pueden ver afectados de manera definitiva.

 

  • Anomalías en las trompas de Falopio o el útero

El aparato reproductor femenino debe estar morfológicamente perfecto para poder llevar a cabo cada una de las fases involucradas en un embarazo, desde la ovulación, hasta el parto, cuando alguna de las partes se afecta, se puede interrumpir, impidiendo el paso de los óvulos, los espermatozoides o los embriones, con lo que se evita un embarazo, pero también, se pueden afectar por accidentes, procesos infecciosos o malformaciones ocurridas cuando la mujer estaba en el vientre materno. Es importante atender cualquier sospecha de infección y realizar revisiones rutinarias con el ginecólogo, al menos una vez al año, para prevenir cualquier afectación a la fertilidad que, a la larga, puede ser grave. 

Dentro de estas anomalías también se engloban los miomas y pólipos, que pueden hacer las veces de dispositivos intrauterinos que impiden la implantación y el correcto funcionamiento del útero para lograr un embarazo.

  • Endometriosis

La endometriosis es una enfermedad con múltiples orígenes, que causa que en un ciclo menstrual típico, en lugar de que el endometrio se caiga completamente en la regla, se sostenga parcialmente y se extienda fuera del útero, causando otros trastornos hormonales asociados, irritaciones de las mucosas en las que se aloja y otras afectaciones que dependerán de las zonas en las que se aloje, que puede ser en cada uno de los órganos o tejidos del cuerpo de la mujer. 

La mayoría de las mujeres usualmente tendrá ciclos menstruales con molestias ligeras, que son pasajeras y se pueden controlar fácilmente con calor o antiinflamatorios suaves; sin embargo, si los cólicos son fuertes y permanecen por mucho tiempo, pueden ser síntoma de endometriosis severa, así que es mucho más importante que la mujer que padece de cólicos fuertes, se atienda, preferentemente con un ginecólogo especialista en el tratamiento de la misma y que a los 6 meses de intentar embarazarse sin éxito, acuda con el especialista en medicina reproductiva, para evitar perder valioso tiempo para los óvulos.

  • Problemas en el moco cervical

El moco cervical es un medio de transporte y de nutrición para los espermatozoides, cuando hay infecciones, alteraciones hormonales o inmunológicas, el moco puede alterarse e impedir el correcto funcionamiento de los espermatozoides en el interior de la vagina y el útero. Normalmente en la parte intermedia del ciclo, el moco cervical debe volverse transparente y elástico, para considerar que hay un correcto ciclo hormonal, si el moco se conserva sin cambios a lo largo del ciclo, puede ser síntoma de que algo no está permitiendo su correcta producción.

  • Trastornos de la sexualidad

Puede parecer obvio, pero no lo es tanto, para poder embarazarse, una pareja debe tener relaciones sexuales constantes y completas, si no ocurre así, el embarazo no se logrará, si hay problemas de dolor durante las relaciones sexuales, falta de erección en el hombre, no hay eyaculado o no pueden completarse correctamente por alguna circunstancia, deben acudir por ayuda de manera inmediata, no solo para lograr embarazo, también porque las relaciones sexuales son parte fundamental de la relación de pareja y del bienestar personal.

¿Hasta ahora se han sentido identificadas con alguna causa? Como verán son muchos los factores que pueden interferir para lograr un embarazo, más de las que pensábamos. Por ello y con el objetivo de poder profundizar en cada tema, esta entrada estuvo dedicada a los factores de riesgo o causas de infertilidad en la mujer.

Las espero para la segunda parte de las principales causas que afectan a la fertilidad, la cual estará enfocada en el factor masculino y es que hablar de este tema me parece muy importante, más cuando estamos iniciando el Mes Internacional del Cuidado de la Fertilidad.

Siempre me da gusto leerte. 

 

Gaby García

Fundadora y Presidenta Pronanhi A.C.