En el camino por infertilidad hay miles de parejas que se encuentran con tantos mitos y falta de información certera alrededor de este tema, que muchas veces creen que lo que les dice el vecino, el amigo, el conocido, es verdadero. Porque seguro han escuchado comentarios como: “después de tener relaciones sexuales, debes de hacer esto” “o ten sexo en esta posición”. ¿Qué hay de cierto en ello?

Quiero empezar contándoles una anécdota para que dimensionemos estos mitos. Recuerdo muy bien a una chica que no sabía que estaba embarazada y que se dio cuenta de ello hasta el quinto mes. Cuando se le confirmó el embarazo, tanto ella como su pareja estaban en shock con la noticia, diciendo que era imposible que ella esté embarazada, pues ellos nunca habían tenido sexo acostados, siempre lo habían hecho de pie.  ¡Imaginen este mito tan grande de pensar que las posturas sexuales pueden impedir un embarazo!

Ahora bien, por el otro lado, en el área de reproducción asistida muchas parejas que han intentado embarazarse, llegaron mencionando que después de tener relaciones sexuales la mujer se queda acostada una hora con los pies más arriba del nivel de su cadera, pero tampoco  lograron embarazarse. Lo que significa que no hay una posición sexual como tal que sirva como preventiva o promovedora del embarazo.

Como esos dos ejemplos, existen muchos mitos sobre las posiciones sexuales y el embarazo, sin embargo, es necesario que quitemos de la mente esa idea, porque científicamente no hay un dato que sustente que existan posiciones sexuales que no permitan el embarazo, ni tampoco aquellas que lo harán posible, por lo tanto, lo consideraremos un gran mito, pero les explico qué es lo lo que pasa en el interior de nuestro cuerpo.

El cuerpo femenino, funciona hormonalmente para lograr un embarazo durante la mitad del ciclo menstrual, con lo que la temperatura vaginal y los fluidos tendrán la tarea de ayudar a los espermatozoides a llegar al óvulo. Este proceso sucede en tiempo muy breve y ocurre para que en la vagina, el líquido vaginal (que están preparado para ello), mejore la movilidad de los espermatozoides y tengan un medio propicio para que lleguen al encuentro del óvulo cerca de las trompas de Falopio.

Dentro del cuerpo humano, la fuerza de gravedad no ejerce la misma influencia que en el exterior, es decir, nuestro interior se encuentra al vacío, así que aunque estemos en la posición sexual que sea, la fuerza de gravedad no será tan determinante en el interior porque los espermatozoides, están diseñados para transportarse a través del líquido (algo así como nadando), por lo que su cuerpo les transportará por el líquido hasta el lugar en el que se encontrarán con un óvulo.

Para lograr un embarazo, se necesita más allá de una posición sexual; un grupo de espermatozoides y la vía correcta para llegar al encuentro con el óvulo, un óvulo viable para poder fecundarlo y el lugar adecuado para llegar a implantarse.

Por ello, es muy importante que si están buscando lograr un embarazo acudan con un especialista en reproducción, pero además tomen en cuenta lo siguiente:

Asegúrense que el conteo, la movilidad y la morfología de los espermatozoides sea suficiente para considerarse normal, para saberlo, se puede hacer un espermiograma en cualquier centro de fertilidad.

Tengan relaciones sexuales durante la ventana fértil de la mujer, que ocurre alrededor de la mitad del ciclo menstrual. Pidan ayuda a su médico para calcular sus días fértiles o incluso pueden encontrar en farmacias kits de ovulación, que les ayudarán a saber en qué momento ocurre la misma.

Acudan con su médico y asegúrense de que no hay infecciones de transmisión sexual, principalmente bacterianas, que ponen un medio hostil para los espermatozoides y para los embriones, que pueden impedir la implantación. Asegurarse de esto es muy sencillo, su médico puede indicarles los estudios adecuados para detectar las infecciones que pueden afectar la fertilidad de la mujer y del hombre.

Pocos días antes de la ovulación, procuren que su pareja eyacule de manera constante, pero también puede ayudar que antes de este día, tengan de 3 a 6 días de abstinencia, no más, pues los espermatozoides tienen un tiempo de vida de 72 horas y la mayoría de los que debían eyacularse, podrían haber muerto.

Si están con obesidad, sobrepeso o alguna alteración hormonal, esto también podría ser una razón de no lograr un embarazo, así que antes de intentar embarazarse, procuren hacer un chequeo médico que les diga cómo está todo en sangre y hormonas, para que si hay algo que tratar, se haga de manera pronta. Si intentan embarazarse y no lo han logrado, estos estudios previos pueden ayudar al especialista en medicina reproductiva a establecer un diagnóstico.

Y algo que parecerá muy obvio, pero no lo es, procuren tener relaciones sexuales de manera constante, pues, más que las posiciones sexuales como tal, la frecuencia de las relaciones sexuales aumenta la probabilidad de lograr un embarazo.

Por último, recuerden lo importante que es comunicarse con su pareja, disfrutarse y lograr esta conexión en la sexualidad, un punto clave en el proceso para convertirse en padres y en su lucha contra la infertilidad.

Si tienes dudas, no dudes en contactarme.

 

Gaby García

Presidenta y fundadora de Pronanhi.A.C