Sé que siempre les digo que lo único mejor que contar con un excelente biólogo de la reproducción es tener alguien con quien desahogarse. Pero últimamente he tenido problemas en bajar a palabras todos los sentimientos que me invaden.

Confieso que llevo poco más de mes y medio sin trabajo, lo cual al principio me pareció una excelente idea, pues mis niveles de estrés, ansiedad, mal humor e insomnio no paraban de intensificarse. Literal, el trabajo estaba acabando conmigo, ¿les ha pasado?

 

Nunca antes había sentido algo así, y nunca antes había renunciado a algo en toda mi vida. Pero después de varios días en cama y varias peleas absurdas con Carlos, tanto él como mi médico me hicieron ver que el trabajo no sólo me estaba lastimando a mí, sino también estaba dificultando el proceso de prepararme para intentar convertirnos en padres. Y eso… ¡no lo iba a permitir!

 

Todo iba bien hasta que recordé que había que pagar mis consultas y mis posibles tratamientos y… sólo sentí que la cabeza comenzaba a darme vueltas y que la vista se me nubló. Cuando me tranquilicé, agarré mi compu y comencé a escribirle a mis conocidos para ver si tenían trabajos freelance que me dieran la oportunidad de descansar y mejorar mi salud, mientras generaba un ingreso (aunque fuera pequeño) para apoyar a Carlos.

 

Y así es como llegué a armar mi nueva rutina, un poco de gym, un poco de ama de casa, un poco de freelance. Hace poco, mientras hacía uno de mis trabajos, me topé con una noticia ya un poco vieja, pero que no había escuchado en ningún medio. Se trataba de… un trasplante de útero, sí, así como lo leen.

 

Al principio creí que era algo tipo película de ficción, pero entre más leía más me impresionaba e interesaba. Al parecer desde 2014 han nacido 8 bebés de mujeres que han recibido un trasplante uterino en Suecia, en el hospital de la Universidad de Sahlgrenska.

 

¡¡Paren prensas!! Van 8 bebés gracias a ese método, ¡wow! Sé que yo no sería candidata para esto, pero…seguro están de acuerdo conmigo en que es un GRAN avance, una ENORME luz de esperanza para aquellas mujeres que mueren por tener un bebé, y desafortunadamente nacieron sin útero o lo perdieron a causa del cáncer u otras enfermedades.

 

Por lo que leí, todavía debo verificarlo con mi doctor, este trasplante está diseñado para ser temporal, es decir, sólo se deja en el cuerpo de la mujer el tiempo necesario para que ésta tenga a uno o dos hijos… pero, ¿por qué? Pues porque para evitar que el cuerpo rechace el órgano, tienen que medicar a la futura mamá con supresores del sistema inmune, y no es bueno prolongar el consumo de estos medicamentos por mucho tiempo.

 

Sé que el trasplante uterino aún está en proceso de prueba, y que seguramente van a querer cobrar el procedimiento CARÍSIMO, pero al menos se están abriendo nuevas puertas para sobrepasar todos los “jamás podrás tener hijos”, que muchas de nosotras hemos tenido que escuchar.

Ustedes, ¿lo harían?

 

Ana